Es una manifestación cultural de origen indígena, se celebra en el Estado Monagas específicamente en el Municipio Acosta, ciudad de San Antonio de Capayacuar.
Cuenta
la leyenda que en tiempos antiguos sólo un manantial, donde los indios
iban a buscar agua, y un día una pareja de niños fue en busca de agua y
una culebra se traga a uno de ellos, al saber la noticia el brujo de la
zona, hizo un conjuro y sacó la culebra del agua, partiéndola por la
mitad para sacarle a la niña, los padres de los niños se llevaron el
cuerpo sin vida para velarlo , al regresar al lugar, notan que la
culebra no estaba, y que en su lugar se encontraba una laguna.
CUENTAN LOS ABORÍGENES
Los indígenas chaima, nación a la cual
pertenecía la tribu de los capaya, pobladores de las regiones que hoy
ocupan San Antonio, Ipure, El Rincón, el antiguo San Francisco, y otros
espacios del municipio Acosta, acuñaron como pieza fundamental en su
cosmovisión a la serpiente. Fue tan importante que llegaron a
clasificarla: equey o aqui (culebra común), equey tenenucren (culebra
pintada: coral y rabo amarillo), tunargaquén (serpiente de cascabel),
vetún (culebra vaheadora, que adormece), canacua (anguila), yuta
(culebra grande: tigra, macaurel), equeymá (serpiente gigantesca), tenía
dos acepciones, en la tierra es la inmensa y terrorífica serpiente
moradora del fondo de las lagunas, pozos y casimbas, a los cuales
protegía con su vida. Matarla es secar la fuente. Es la impresionante y
temible equeymá terrestre; en la concepción de la vida y de la muerte,
es la inconmensurable serpiente irisada que se comba y lleva sobre su
sedosa y caleidoscópica piel el alma (rinón) de los chaima cuando
mueren, desde la tierra hasta las manos de Amanaroca, su modelador, para
que las entregue al Todopoderoso Ziz. La culebra de Ipure, pues, está
enmarcada dentro de la más genuina cultura primigenia chaima. No es un
mito, como la asume la versión común de una visión vulgar y repetitiva.
Una leyenda tal vez, creo que muy poco
deformada. La tradición ha mantenido la narración oral por un tiempo
incuantificable, conservando hasta el nombre de la familia protagonista
de los hechos: Una pareja de niños de la familia Taya fue por agua a la
cercana laguna de Ipure, taparas en mano.
Cuando, inclinados a orillas de la
misma, llenaban los recipientes, emergió, súbito, la descomunal cabeza;
un borbollón de espumas encrespó las aguas y la mole furiosa que emerge a
medias y se sumerge con la niña prendida a las fauces. El hermanito
vuelve despavorido y cuenta en la ranchería la pavorosa experiencia. Se
organiza una partida con el piache al frente y rastrean el fondo hasta
encontrar al gigantesco animal adormitado; lo degüellan y lo izan; fuera
le abren el vientre y le extraen a la niña muerta. Esto sucedió en
Ipure, aledaño a San Antonio de Capayacuar. A partir de ese momento,
cada año y por la misma fecha, se conmemoraba el suceso conformando una
serpiente humana, distribuyendo un grupo de indígenas de mayor a menor y
luego se ejecutaba una danza quejumbrosa y doliente, simulando
absolutamente todos los detalles del hecho. Llama la atención que,
siendo esta danza la expresión de un suceso trágico con la enorme carga
de dramatismo que supone, la letra que se versifica y canta sólo sea una
oda a una serpiente minúscula e inofensiva, asignándole, de paso, una
peligrosidad que en nada posee. Ni las más ligera alusión al discurso
legendario que motiva esta danza, se reseña, lamentablemente, en la
pieza.
LA DANZA
Se seleccionan y preparan veinticinco muchachas de diferentes estaturas, siendo las últimas cinco muy pequeñas.
Hacen una cadena colocando cada una sus
manos sobre los hombros en la que la antecede. A medida que la danza se
desarrolla las participantes van ejecutando los movimientos que hacen
las culebras al reptar; luego se enroscan, se desenroscan rítmicamente;
simulan el atrapar y engullir a la niña, y en algunos casos de buenas
coreografías, la muerte del animal y la recuperación de la víctima. Todo
depende de quien dirija el montaje y de quien idee la coreografía.
EL VESTUARIO
Las primeras veinte danzarinas visten
blusas amarillas y faldas amplias negras con bordes amarillos; las
últimas cinco, que representan la cola, van con blusas y faldas sólo
amarillas. De igual manera acostumbran vestir los músicos que acompañan
el espectáculo.
Imagino que lo mismo pudieron hacerlo
imitando a la coral, con trajes negros y rojos, en vez de la rabo
amarillo; porque, todo hace presumir que lo que se buscaba eran efectos
de colorido, los cuales muy bien se pueden sacar de los movimientos;
porque no vemos la necesidad de sacrificar la lógica en aras de un
efecto estético, teniendo a mano, sin esfuerzo alguno, el enorme
potencial del conjunto de los elementos lógicos. Una rabo amarillo no
pasa de medir unos 60 centímetros; regálele hasta un metro; a eso se
agrega que es una culebrita inofensiva, la cual, según las consejas, se
dedica a cuerear a las mujeres embarazadas en las orillas de los caminos
o de los ríos y más nada; por su boca, abierta de par en par, no pasa,
por mucha que sea la pretensión de su parte, una que otra rana y unos
incautos ratones. La culebra debió ser una tremenda culebra de agua;
bellas por cierto, de un tan fino como elegante estampado con las más
sutiles y hermosas tonalidades o variantes del marrón. Así debía ser el
traje.
LA MÚSICA
El hecho fue luctuoso y el alma indígena
es altamente sensible y propensa a la melancolía, por eso su música,
por lo general, era y es el mare-mare o matachí, no importa que la cosa
esté pasando en una comunidad kariña, inventores de este ritmo, o en los
palafitos warao o en lo profundo de los montes chaima. El contacto
criollo ha sincretizado no sólo los instrumentos, si no también el ritmo
original de este baile ritual. De lo aborigen quedaron los carrizos y
el cacho y a veces hasta el ciriaco y la guarura; de lo criollo se
colaron el cuatro, el tambor y hasta mandolinas y guitarras hemos visto
ejecutar en estos eventos.
La danza se va desarrollando a medida
que alguien va cantando una serie de versos, de los cuales existen
varias versiones de diferentes autores. También existen varios grupos
que son propiamente fundaciones con el nombre de La culebra; pero el más
reconocido y respetado, con mayor tradición y constancia es, al decir
de los entrevistados, el que dirige la señora Columba Rodríguez, la
matrona de La culebra.
Es oportuno recordar que ésta es una de
las tres piezas verdaderamente folclóricas y de paso aborígenes, con las
cuales cuenta el estado Monagas, a pesar de que los versos, en todas
las versiones, tienen autoría.
Los versos:
¡Oh pueblo de San Antonio
te venimos a saludar,
con el baile de la culebra
que te vamos a presentar!.
El conjunto está formado
de catorce tocadores,
y la culebra vestida
de dos bonitos colores.
Esta culebra se baila
con bastante signatura,
porque ella está compuesta
de veinticinco coyunturas.
Yo le puse a esta culebra
nombre de rabo amarillo,
porque cuerea con el rabo
y muerde con los colmillos.
Si esta culebra los muerde
no la vayan a matar,
porque usted no paga el precio
de lo que pueda costar.
Culebra rabo amarillo
yo te pensaba matar,
pero yo te tengo miedo
porque te vas a enrollar.
Culebra rabo amarillo
¿por qué estás en ese estado?
enrollaste la cabeza
también enrollaste el rabo.
Esta culebra de Ipure
venimos a presentar,
ya que se encuentra enrollada
se puede desenrollar.
Patrimonio Cultural Viviente
Agustín Bello
Patrimonio Cultural Viviente
¡En el siguiente video podrás observar
una coreografía alternativa para montar el baile de la culebra!
13 comentarios :
Muy buena información me ayudo con una tarea
Gracias!
Muy buena la idea .. Pero creo que lo ley en otro sitio wuet , pero bueno muy bonito y gracia nesesitavá saber uun poco mas de la culebraa de ipure .....
Muy buena me ayudó para una tarea gracias
gracias por toda la ayuda pero la culebra de ipure no es de zucre
No, no es de "Sucre"
LA culebra de Ipure fue creada por la cultora Columba del Valle Salazar en San Antonio de Capanacuar estado Monagas.
Quisiera saber si existe fuente bibliográfica sobre la Culebra de Ipure y como puedo obtener algún material impreso
Hijos de puta
jajajajajajajajajajajajajaja
Uuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu
el que lea esto es un mamaguevo tripe Hijueputa malditos putos mmhuevos maduro coño de tu madre hijo de las 100 perras
san rafael de Onoto putoa mamaguevos
a
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